Londres, 27 feb (Prensa Latina) La primera parte del juicio de extradición de Julian Assange a Estados Unidos concluyó hoy aquí un día antes de lo previsto, matizado por quejas sobre el tratamiento que recibió en la corte el fundador de Wikileaks.
La vista oral comenzó el lunes pasado en un tribunal del sureste de Londres, aledaño a la prisión de máxima seguridad de Belmarsh, donde el periodista australiano está encarcelado desde su arresto en la embajada de Ecuador en esta capital 10 meses atrás.
En un principio se anunció que este primer tramo de la audiencia se extendería hasta mañana viernes, pero este jueves la jueza a cargo del caso, Vanessa Baraitser, dio por concluida la presentación de los argumentos legales por parte de los fiscales estadounidenses y de la defensa.
El juicio se reanudará el 18 de mayo con las declaraciones de los testigos de ambas partes, en un proceso que podría demorar hasta tres semanas.
Al inicio de la vista oral, los representantes del gobierno de Estados Unidos ante la justicia británica negaron que la petición de extradición partía de la divulgación por Wikileaks de decenas de miles de archivos secretos de la diplomacia y los militares norteamericanos.
Según los fiscales, Washington quiere enjuiciar a Assange por haber puesto en peligro la vida de los informantes del Ejército en Iraq y Afganistán cuyos nombres aparecieron en los documentos publicados.
La defensa, por su parte, intentó demostrar que el tratado vigente entre Estados Unidos y el Reino Unido prohíbe la extradición por delitos políticos, como es el caso, alegaron, de las acusaciones presentadas contra su cliente.
De acuerdo con el equipo de abogados que coordina el juez español Baltazar Garzón, de los 18 cargos imputados a Assange, 17 son de índole político, por estar relacionados con la violación de la ley de espionaje introducida en el código penal norteamericano en 1903.
La acusación restante es por conspiración para cometer piratería informática, y tiene que ver con la filtración de los documentos a cargo de la exsoldado de Inteligencia Chelsea Manning en 2010.
Ante el rechazo de la fiscalía a aceptar la naturaleza política de los cargos, el abogado defensor Edward Fitzgerald aseveró este jueves que la denuncia que hizo Wikileaks de los crímenes de guerra y de la corrupción cometidos por los militares norteamericanos tenía como objetivo provocar cambios en la posición del gobierno de Estados Unidos.
Sí provocó cambios, y fue una las razones detrás de la retirada de las tropas norteamericanas de Iraq, y también cuando escuchamos a Estados Unidos decir que Wikileaks se oponía a su política en Afganistán, aseveró el letrado.
Durante el proceso hubo reiteradas quejas de la defensa por el tratamiento que recibió Assange en el tribunal de Woolwich, donde debió permanecer encerrado en una cabina de cristal, separado del resto de la sala, y sin tener acceso directo a sus abogados.
La jueza Baraitser se rehusó, sin embargo, a permitir que el defendido se sentara junto a su equipo, y solo accedió este jueves a que se le proporcionaran unos audífonos para que pudiera escuchar los argumentos.
De ser entregado a la justicia norteamericana, Assange podría ser condenado a 175 años de cárcel.